La juventud eterna, esa fantasía acariciada por la humanidad desde tiempos recónditos, está más cerca merced a los avances de la medicina estética. Eso sí, sentirse y verse más joven es un gusto que no todos pueden darse.
Una semana de estancia en la clínica suiza La Prairie (ver fotografías) para acceder a un exclusivo tratamiento de revitalización tiene un costo que va de dieciocho y quinientos a veintiocho dólares estadounidenses, conforme el género de habitación. A esto hay que sumarle el pasaje aéreo, por un valor desde mil quinientos.
Los argentinos son los sudamericanos que más visitan La Prairie, conforme el representante regional de la clínica, Willie Carballo. En dos mil nueve, 6 de cada diez pacientes argentinos fueron hombres. Susana Giménez, Mirtha Legrand, Teté Coustarot y Diego Maradona son ciertos que la conocieron.
«Se administra un concentrado que te devuelve la vitalidad perdida y te suma calidad de vida. Es una estética que dura pues viene de adentro», explica Carballo. Además de esto, el complejo suizo cuenta con un spa de nueva generación con otras opciones alternativas para conseguir el rejuvenecimiento, como el ATS, consistentes en la aplicación sobre el semblante de electrodos de oro y corriente eléctrica para producir un lifting .
Edgardo Chouela, maestro de dermatología de la Universidad de la ciudad de Buenos Aires, explica que los tratamientos de rejuvenecimiento persiguen diferentes objetivos conforme la edad. Hasta los treinta y cinco años se corrigen imperfecciones, de los treinta y cinco a los cincuenta y cinco se combate la piel plegada y desde los cincuenta y cinco se trabaja para restaurar el cutis. «Cada vez se hacen menos liftings en el planeta, la gente busca procedimientos no invasivos», comenta Chouela. Uno de los procesos más modernos para combatir el paso de los años es la radiofrecuencia tripolar.
Velia Lemel, miembro de la Sociedad Argentina de Dermatología, cuenta que los tratamientos de radiofrecuencia llamados Thermage son conocidos como «el lifting del almuerzo» por el hecho de que se pueden hacer en una hora con un costo aproximado de US dólares americanos dos mil seiscientos. «Es ideal para gente ocupadísima o bien gente que trabaja en los medios por el hecho de que se hace veloz y no se aprecia en el día», añade.
Lemel considera que la Argentina está en los mejores estándares internacionales de medicina estética y es un mercado en pleno desarrollo. La cantidad de pacientes en la Clinica Lemel medra a un ritmo aproximado del veinte por ciento anual.
Mónica Milito, cirujana, afirma que en los últimos un par de años se propagó en el país la medicina ortomolecular. El plasma rico, una terapia de esa disciplina, consiste en la extracción de un tanto de sangre que se enriquece en plaquetas a través de un proceso de centrifugado y después se aplica en las zonas más avejentadas. Se aconsejan 3 sesiones por año, que tienen un valor aproximado total de US dólares americanos mil quinientos.
La primera consulta en medicina antiage para mujeres es a una edad promedio de treinta y cinco años, conforme Milito. En los hombres acostumbra a ser poco antes, mas van con menos frecuencia que las mujeres. «Los pacientes vienen una vez por año y se hacen todo junto. Las mujeres, en cambio, vienen cada un par de meses.»
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