En este post les daré algunos trucos muy útiles para evitar este molesto problema, y las consecuentes burlas o comentarios subidos de tono que pueden hacernos los hombres por la calle.
Ante todo hay que elegir correctamente la ropa interior y los pantalones que se vayan a usar. Después de esto, puede ser de utilidad:
Siempre usar ropa interior
Parece una obviedad ya que no existe ninguna buena razón para usar los pantalones de vestir sin ropa interior, pero algunas si lo hacen.
Los tejidos elastizados son realmente traicioneros, sobre todo cuando no se llevan bragas por debajo. Resultan demasiado reveladores.
Una adecuada ropa interior
Si además de un pantalón elastizado, llevamos bragas finitas que tienden a meterse en medio de la vulva… el resultado será desastroso.
El calzón tiene que cubrir bien la vagina y no meterse en medio de los labios, por eso es mejor evitar todos los que sean de encaje.
Optar por pantalones de moda que tengan forro en esta zona
Los pantalones de ejercicio suelen venir con un revestimiento adicional en la entrepierna, para evitar justamente que se marque demasiado la vagina.
No subir demasiado el pantalón
La principal causa del cameltoe es cuando se suben demasiado los pantalones o las calzas, por ello siempre conviene comprobar esto a la hora de comprar la prenda. Tiene que quedar cómoda en la cadera o cintura, sin necesidad de subirla más de la cuenta.
Usar protectores
Los protectores pueden ayudar a controlar el problema, doblándolos al medio y colocándolos en el centro de la vulva, donde el pantalón se marca.
También se puede intentar con un pedazo de cartulina flexible, debajo del protector para una mayor protección.
Cabe destacar que esta es una solución para los pantalones vaqueros ajustados, ya que en las leggins o pantalones deportivos, el protector no va a permanecer en el lugar por mucho tiempo si comienza a ejercicio.