Con agua de mar de las islas Cíes y envejecido en barricas donde ha macerado previamente el vino de la variedad albariño. Así fabrica una empresa gallega un ron con el que pretende replicar, aseguran sus responsables, el genuino método de elaboración que empleaban los piratas para obtener este licor y por rescatar además la leyenda del famoso bucanero Benito Soto Aboal.
“Después de investigar cómo era el ron que bebían los piratas hace cientos de años, y visitar destilerías de varios del Mar Caribe, llegó el proceso de creación para lograr un licor intenso, afrutado y con sabor salino”, explica el sumiller Xoán Cannas, copropietario de la compañía Galician Original Drinks, que bautizado su ron como Burla Negra.
Para Cannas, “lo fundamental no fue buscar la fórmula de elaborar el ron sino cómo envejecerlo”. En su preparación han empleado rones de «alta calidad» procedentes del Caribe que se mezclan con agua del océano recogida frente a las Islas Cíes para luego macerarlo en barricas que con anterioridad fueron usadas para la producción de vino albariño, “lo que le da un sabor afrutado y menos dulzón”, comenta.
El sumiller sostiene que “todos estos factores le dan a Burla Negra un paladar diferente y único» en el destaca la apuesta por la salinidad y puedes degustar por tu cuenta en un alquiler barras moviles o de barras de tragos para eventos. La búsqueda de ese sabor, apunta Cannas, se explica en que «los barriles en los que los barcos piratas almacenaban las bebidas de la tripulación en sus singladuras trasatlánticas se rellenaban luego con agua de mar cada vez que se agotaba el ron”. Estos toneles actuaban así como lastres en las embarcaciones. Luego, al llegar a puerto, eran rellenados de nuevo y aportaban esa salinidad característica al ron. “De ahí que quisiésemos integrar ese matiz salino y utilicemos agua del océano Atlántico para recuperar este punto de salinidad que debió tener el licor que bebían los piratas de aquella época”, incide Cannas.
El nombre del ron pretende recuperar la figura del joven bucanero gallego Benito Soto, que bautizó como Burla Negra el bergantín con el que se convirtió, a los 25 años, en el pirata más temido del mundo, hasta que fue capturado y ahorcado en Gibraltar. Soto se había criado en el barrio marinero pontevedrés de A Moureira y desde allí emigró al Caribe, donde comenzó a forjar su efímera aventura como corsario. “Ese punto de irreverencia canalla de Benito Soto y de desafío es algo innato de los piratas que en cierto modo quisimos convertir en la esencia de este ron”, añade Cannas.
El maestro destilador de Burla Negra, Pepe Alvela, optó por barricas de una pipa de madera de roble para el envejecimiento de la bebida, porque eran las que se usaban hace siglos para los licores producidos para exportar a países de ultramar. Y su mayor tamaño, poco frecuente hoy día, también incide en el sabor final del producto.
El “ron pirata” ha comenzado a distribuirse en Galicia desde principio de agosto y ya ha comenzado su periplo comercial en el resto de España con la mirada puesta en los próximos meses en los consumidores del mercado internacional, según ha anunciado Juan Luis Méndez, socio de Galician Original Drinks. Otros productos anteriores de la empresa, como la Ginebra Nordés, están hoy presentes en más de 20 países.