La aplicación móvil ahora incluye una función de asistente virtual sin necesidad de un plan de pago.
En el contexto del reciente debate sobre el despido y posterior reinstauración del CEO Sam Altman, OpenAI ha introducido una actualización en su aplicación móvil ChatGPT, agregando una innovadora función de voz. Esta permite interactuar con la inteligencia artificial de manera instantánea, similar a asistentes como Siri o el Asistente de Google.
«ChatGPT con función de voz ya está accesible gratuitamente para todos. Solo descarga la app en tu móvil y toca el icono de audífonos para comenzar una charla», anunció la empresa en su perfil oficial de X (anteriormente Twitter). Lo destacado de esta actualización es que la función de voz está disponible sin necesidad de suscripción a los planes premium de OpenAI.
Según muestra la empresa, un usuario pregunta cuántas pizzas debe pedir para 758 personas, asegurándose de que cada una reciba al menos tres rebanadas. Prontamente, la inteligencia artificial responde con una voz generada por ordenador que suena sorprendentemente natural.
Esta nueva actualización se desplegará progresivamente para todos los usuarios que tengan la app de ChatGPT en sus smartphones o que la descarguen próximamente. Al iniciar sesión con su email, encontrarán un ícono de audífonos en la esquina inferior derecha de la pantalla.
Al pulsar este botón, los usuarios podrán usar la nueva función de voz, que también les permite seleccionar la voz del asistente virtual para las conversaciones con ChatGPT.
Para una instalación sin problemas, los usuarios deben verificar que la app muestre OpenAI como su desarrollador, detalle visible en la parte inferior del nombre de la app en tiendas como App Store o Google Play Store.
Persiste la controversia en torno al despido de Sam Altman
Recientemente, la junta directiva de OpenAI decidió despedir a Sam Altman, cesándolo de su puesto como CEO de la empresa, debido a la pérdida de confianza en su liderazgo.
En respuesta, un grupo numeroso de empleados, que comprende a 505 de los 700 miembros del personal de la compañía, envió una carta a la dirección exigiendo dos cosas: la dimisión de los actuales líderes y la reinstauración de Altman como CEO.
La carta, firmada unánimemente por el personal, también solicita el retorno de Greg Brockman como presidente de la empresa, quien había renunciado en el contexto del despido de Altman. De no cumplirse estas demandas, los empleados amenazaron con renunciar y unirse a Microsoft, lo que dejaría a OpenAI con tan solo 195 empleados, una disminución de más del 72% y una crisis operativa para la compañía y sus numerosas aplicaciones de inteligencia artificial.
En la carta, el personal acusa a la dirección de la empresa de comprometer el trabajo y la misión de OpenAI, así como de socavar la integridad de la empresa. Afirman que la decisión de despedir a Altman y provocar la renuncia de Brockman evidencia una «clara incompetencia en la supervisión de las operaciones de OpenAI».
Tras recibir la carta, Ilya Sutskever, cofundador de OpenAI y miembro del consejo que despidió a Altman, expresó su arrepentimiento en un mensaje en su cuenta de X (anteriormente Twitter), indicando que nunca tuvo la intención de perjudicar a OpenAI. «Amo todo lo que hemos construido juntos y haré lo posible para unificar de nuevo a la empresa», declaró.